Huesos de santo

Para elaborar la masa del mazapán hervimos el agua junto con el azúcar durante cinco minutos.

Añadimos la almendra molida y dejamos en el frigorífico durante 24 horas.

Elaboramos la yema tostada. Para ello, mezclamos los huevos y la harina en un bol con 70 g de azúcar.

Vertemos 100 ml de agua en un cazo con otros 500 g de azúcar y dejamos hervir durante cinco minutos.

Después, juntamos con la mezcla anterior, removemos y hervimos otra vez.

Estiramos la masa del mazapán sobre una superficie lisa con azúcar glas para evitar que se pegue la masa, (no usar la harina). Cortar en rectángulos de cinco centímetros, aproximadamente.

Para poder sellar posteriormente el hueso de santo, untamos un poco de almíbar, con una brocha fina, en uno de los extremos de cada corte.

Damos forma de cilindro a cada porción. Al apoyar sobre la encimera o recipiente en el que se deposite, dejamos en vertical para que no se aplasten con el propio peso.

Cuando se hayan preparado todos los huesos, rellenamos de yema con una manga pastelera y servimos.