Pastela de pollo y almendras

Doramos las pechugas con azúcar a fuego medio hasta que cojan color y añadimos las cebollas en juliana

Añadimos agua hasta que cubra y vamos echando todas nuestras especias, dejamos hervir a fuego medio unos 20 minutos o hasta que reduzca y se forme una salsa más espesa

Mientras tanto, en un mortero ponemos las almendras, el agua de azahar, una cucharadita de canela y una cucharada de azúcar y picamos hasta que queden trozos pequeños de almendras, no muy molidas

Reservamos el pollo ya hecho para que se enfríe y lo deshilachamos. Mientras tanto dejamos al fuego la salsa hasta que reduzca a la mitad

Añadimos los hilos de pollo a la salsa reducida y vamos añadiendo los huevos batidos progresivamente y a fuego medio o medio-bajo para que no se cueza el huevo en la sartén. Removemos y cuando se haga más compacto reservamos y dejamos enfriar

Mientras nuestra mezcla se enfría, ponemos el horno a calentar. Batimos un huevo y vamos pintando todas nuestras hojas de pasta filo con él. Colocamos de 3 a 4 capas bien pintadas en un molde metálico previamente engrasado con aceite o mantequilla (dependiendo de si queremos una pastela grande o varias individuales)

Añadimos una buena capa de nuestra mezcla de pollo. Colocamos otras 2 o 3 capas de masa filo y colocamos la capa de almendras que picamos en el mortero antes

Cerramos y pintamos bien para sellar. Metemos al gorno (previamente calentado a 180ªC), calor arriba y abajo, bandeja en el centro unos 10 o 15 minutos o hasta que quede la masa bien dorada. Una vez fuera del horno espolvoreamos azúcar glas y canela en polvo al gusto