Milhojas de nata y trufa

Hacer la trufa: Un día antes de hacer la tarta, poner medio litro de nata para montar en un cazo a fuego medio junto con dos cucharadas de azúcar glass. Cuando rompa a hervir, retirar del fuego y añadir los 100 gramos de chocolate troceado. Remover para incorporar y fundir. Volcar en un cuenco, dejar templar y cubrir con papel film tocando la superficie de la trufa para que no forme costra. Meter a la nevera hasta el momento de hacer la tarta.

El día de hacer la tarta: Precalentar el horno a 170ºC con calor arriba y abajo. Si la masa de hojaldre no es rectangular, cortarla con dicha forma utilizando algo que ayude a hacer las placas de la misma forma, por ejemplo, una cartulina.

Introducir las tres placas de hojaldre en el horno a media altura, poniendo encima de ellas alguna bandeja o recipiente que haga peso sobre ellas ya que queremos que el hojaldre no se hinche para obtener milhojas finas y planas. Hornear unos 15-20 minutos hasta que veamos que empieza a tomar color.

Sacar el hojaldre del horno y dejar enfriar.

Mientras el hojaldre se enfría, montaremos la nata y la trufa. Se puede hacer a mano, con máquina o bien con una batidora. La nata debe estar bien fría, recién sacada de la nevera, pues sino no montará. Nos irá muy bien si unas horas antes introducimos en la nevera el bol donde vamos a montarla para que la nata no pierda temperatura.

Poner medio litro de nata junto con 2 cucharadas de azúcar glass en el cuenco donde vayamos a montarla. Con batidora de mano, elige el accesorio batidor de varillas a velocidad media. En unos 3-4 minutos la nata habrá montado. Si quieres darle un toque de sabor, añade media cucharada de aroma de vainilla y bate para incorporarlo. Mete la nata en la nevera.

Haz lo mismo con la trufa que hiciste el día anterior.

Cuando el hojaldre no esté caliente, procede a montar la tarta. Sobre la bandeja en la que la quieras presentar, pon la primera capa de hojaldre y, con la ayuda de una manga, incorpora la nata y la trufa intercalándolas o haciendo la mitad de la tarta de nata y la mitad de chocolate, para que tus invitados puedan elegir el sabor que prefieran. Cuando hayas puesto una capa de nata y trufa, pon encima la segunda capa de hojaldre y haz lo mismo con la nata y la trufa. Finaliza con la tercera capa de hojaldre y dale un toque decorativo espolvoreando cacao en polvo y azúcar glass. Puedes usar una plantilla para crear un dibujo y unas flores o fruta para darle un toque de color. Lista y deliciosa!!

Recuerda conservar esta tarta en la nevera para evitar que la nata baje y conservar su sabor.