Galletitas de mantequilla, anis y canela

Batimos la mantequilla a velocidad baja, si nuestro robot tiene 10 velocidades, la indicada será la 3, hasta conseguir una consistencia suave. Vamos añadiendo el azúcar a cucharadas y bajamos al máximo la velocidad, al número 1, así hasta acabar con todo el azúcar, incorporamos ahora el anís y vamos echando el huevo y la yema ligeramente batido, poco a poco. Cuando el huevo este integrado vamos añadiendo la harina, siguiendo a velocidad baja, 1, hasta terminar con toda la harina y conseguir una masa homogénea. Sacar la masa y poner sobre papel de horno, le damos forma redonda y aplastamos, cortamos en dos trozos iguales. Poner cada trozo entre dos papeles de horno y estirar con un rodillo dejándola de unos 6 mm.

Repetir esta operación con el otro trozo de masa. Colocar sobre una bandeja y meter a la nevera 3 horas.

Una vez refrigerada trabajaremos deprisa porque ahora hace mucho calor, sacamos primero una de las masas estiradas, levantamos la hoja de papel de horno y echamos sobre ella anís en grano, ponemos de nuevo el papel de horno, le pasamos el rodillo de nuevo sin apretar demasiado para que se claven los granitos de anís. Cortamos con el cortapastas elegido y vamos colocando sobre una bandeja de horno

A la otra masa podemos ponerle azúcar y canela en lugar de granos de anís, cortamos con el cortapastas las galletas y colocamos en la placa. Cogemos un puñado de azúcar y le añadimos una cucharadita de canela en polvo, removemos e incorporamos unas gotas de agua, cogemos montoncitos de esta azúcar humedecida y la ponemos sobre las galletitas, de este modo tendremos unas con granos de anís y otras con azúcar y canela.

Calentamos el horno a 180º calor arriba y abajo, sin aire, horneamos durante unos 10 minutos porque son pequeñitas, vigilando, si las hacemos más grandes deberemos dejarlas un poco más de tiempo en el horno, hasta que los bordes tomen color.