Cheesecake light

Lavamos bien las fresas y le retiramos las hojas verdes. Las trituramos muy bien y colamos esta batido para eliminar las pepitas.

Ponemos las fresas batidas con 2-3 gotas de edulcorante a fuego suave unos 10 minutos, hasta que se evapore parte del agua. Retiramos y reservamos en la nevera.

Mezclamos los yogures con el queso, los huevos, el resto del edulcorante y el zumo de medio limón hasta que obtengamos una crema homogénea y sin grumos. Será más fácil si tenemos todos los ingredientes a temperatura ambiente (es suficiente con sacar de la nevera los productos media hora antes de empezar).

Vertemos la mezcla de queso y yogur en un recipiente apto para horno, y lo horneamos a 120ºC, con el horno precalentado, unos 30 minutos (esto siempre variará en función de las cantidades y del horno).

Sacamos del horno, dejamos enfriar en la nevera al menos 6 horas, cubrimos con la salsa de fresas y lista!