Carrot cake con pasas, nueces y naranja

Empezamos añadiéndole a la harina, la canela, la levadura, la nuez moscada, la sal y el jengibre. Lo removemos hasta que esté todo bien mezclado y reservamos para utilizarlo más adelante.

En un bol añadimos el azúcar moreno y el aceite. Y mezclamos un poquito con unas varillas de mano. Añadimos los huevos uno a uno. Para que nuestro bizcocho tenga una buena consistencia, debemos asegurarnos de que antes de añadir el siguiente huevo, debe estar bien integrado el anterior.

Cuando los huevos estén bien incorporados empezamos a añadir los ingredientes secos poco a poco. De esta manera no tendremos ni un grumito de harina en la masa. Recordad también no batir en exceso la harina. De lo contrario, el bizcocho quedará apelmazado.

Añadimos la zanahoria y la ralladura de naranja. Con una lengua repostera lo mezclamos bien.

Cuando esté bien mezclado, añadimos las pasas y las nueces. Me encanta ese dulzor tan especial que le dan las pasas y el toque amaderado de las nueces. Ya veréis que combinación tan rica!!!

Engrasamos 3 moldes para layer cakes de 15cm y repartimos la masa en ellos. Los ponemos en el horno precalentado a 170º.

Horneamos durante 25 minutos. El horno debe estar con calor arriba y abajo sin ventilador. Ponemos los moldes en el tercio inferior del horno para evitar que se nos queme la parte superior de los bizcochos.

Recién sacados los bizcochos del horno, los ponemos sobre una rejilla y los dejamos reposar durante 10 minutos antes de sacarlos del molde. Pasado este tiempo ya los podemos desmoldar. Los dejamos en una rejilla para que se enfríen por completo.

Para hacer el frosting, empezamos batiendo la mantequilla a velocidad máxima durante 5 minutos. La mantequilla debe estar a temperatura ambiente.

Cuando tengamos lista la mantequilla, añadimos el azúcar glass poco a poco. En este caso lo hacemos así, porque estamos añadiendo el doble de azúcar que de mantequilla. Así que esta es la manera más fácil para que se integren perfectamente. Una vez lo añadamos todo, batimos otros 5 minutos más.

Ahora, añadiremos el queso crema y batimos un par de minutos. El queso crema es el único ingrediente de esta receta que se debe añadir bien frío. Es decir, lo mejor es que lo tengamos en la nevera hasta justo antes de utilizarlo.

Para montar la tarta, empezamos por rellenar las capas de bizcocho con el frosting. Así que vamos intercalando las capas de bizcocho con el frosting,

Cubrimos toda la tarta con el frosting. Esta primera cobertura es la llamada capa recoge-migas y será la base para la cobertura definitiva. Una vez alisada, la ponemos en la nevera durante 30 minutos para que endurezca un poquito.

Pasados los 30 minutos ya podemos poner la cobertura definitiva. Esta segunda capa de frosting será mucho más sencilla de poner porque ya tenemos una base uniforme. Así que repetimos el proceso anterior

Para decorar los laterales, utilizaremos nueces trituradas. Con la mano, vamos colocando la nueces poquito a poco. Tened cuidado de ponerlas únicamente en los laterales y no en la parte superior. Cuando estén todas las paredes bien cubiertas, presionamos un poquito para incrustar bien las nueces y que no se caigan.

Con el frosting que nos había sobrado, hacemos unos piquitos por todo el contorno de la tarta. Yo me he decidido por una boquilla redonda estriada. Pero podéis utilizar la que más os guste.

Para finalizar la decoración, vamos a utilizar un poquito de zanahoria cruda rallada. Esto le dará un toque de color y a la vez será una pista del sabor de la tarta!

Y ahora sí ya tenemos lista nuestra carrot cake. Es mi tarta preferida, espero que la probéis. Seguro que también será una de vuestras favoritas.