Pollo al chilindrón

Se pican todas las verduras y se ponen a rehogar en una cazuela (cebolla, pimiento verde, pimiento rojo y 2 dientes de ajo), se le añade sal a las verduras para que se ablanden bien y se deja a fuego suave hasta que queden bien rehogadas e incluso, un poco doradas. También se le puede añadir un poco de pimienta negra. Reservamos en la misma cazuela.

En una sartén con aceite caliente doramos los trozos de pollo previamente sazonados y pasados por harina (no mucha, solo una fina capa). Una vez fritos los reservamos en una fuente sobre papel de cocina o sobre un gran colador a fin de quitar todo el aceite posible tras haberlo frito.

Volvemos a la cazuela de las verduras y añadimos la carne de los pimientos choriceros. Es muy importante dejar los pimientos a remojo, bien sea en agua fría desde el día anterior o bien en agua caliente un par de horas antes de su uso.
También añadimos a las verduras un vaso de sidra o un vaso de txakoli o vino blanco y unos tres vasos de agua. Dejamos que todo hierva a fuego lento durante unos 5 minutos y posteriormente añadimos el pollo ya frito.
Una vez que el pollo está en la cazuela con todas las verduras dejamos que se cocine a fuego muy suave durante unos 20 minutos.

Para terminar con esta receta ponemos en un mortero los otros dos dientes de ajo, el perejil picado un chorrito de vinagre y los trocitos de pan frito, una vez que todo está bien majado lo añadimos a la cazuela y le damos un hervor.

Ya está el plato preparado para servir y disfrutar con unos intensos y sabrosos sabores.

¡BUEN PROVECHO!