Perdíz asada con dátiles y salsa de soja

Limpiamos las perdices, separando los muslos y las pechugas. Reservamos las carcasas. Salpimentamos las pechugas y los muslos - que habremos partido por la mitad, cada uno con su contra muslo - por todos los lados y los marcamos en una sartén caliente con un poco de aceite. Reservamos.
Para el jugo, doramos las carcasas en una cazuela con una cucharada de aceite. Agregamos la cebolla cortada en juliana, la salsa de soja y el vino tinto y cocemos hasta que reduzca. Colamos la salsa y reservamos caliente.
Cortamos los dátiles por la mitad, quitamos los huesos y reservamos.
Incorporamos los muslos a la salsa y terminamos de cocinarlos, al mismo tiempo que reducimos la salsa un poco mas. En el último momento añadimos los dátiles, dejamos un par de minutos y reservamos.
Precalentamos el horno a 180º , y terminamos de hacer las pechugas durante unos 5 o 6 minutos mas.
Emplatamos poniendo un muslo con su contra muslo en un lado del plato. Fileteamos la pechuga y la ponemos a un lado del muslo. Colocamos los dátiles- tres mitades por ración – y napamos todo con la salsa.
Terminamos le plato con unas hojas de lechuga variada y brotes al gusto de cada uno.

Foto del plato terminado: