Layer cake de chocolate negro y dulce de leche

1. Prepara en primer lugar el ganache de chocolate: pon la nata a calentar. Cuando empiece a hervir, viértela sobre el chocolate negro muy finamente troceado. Espera un par de minutos para que éste tome temperatura y se empiece a derretir. Remueve bien hasta tener una crema chocolateada. Déjala reposar a temperatura ambiente cubierta con un film un par de horas hasta que tenga la textura de una crema de cacao.

2. Para preparar el bizcocho comienza precalentando el horno a 180ºC. Mezcla el aceite con el azúcar y los huevos. Todos los ingredientes deben estar a temperatura ambiente.

3. Tamiza la harina con el cacao y la levadura. Ve incorporando poco a poco a la masa la mitad de estos elementos secos alternados con la mitad de la leche. Repite el proceso hasta tenerlo todo incorporado y bien mezclado.

4. Vierte la pasta de vainilla y el agua hirviendo. Quedará una masa bastante líquida, pero no te preocupes porque eso ayudará a que el bizcocho esté muy muy jugoso.

5. Engrasa los moldes y vierte la masa a partes iguales usando una cuchara de helado. Hornea durante 25 minutos a 180ºC o hasta que al pinchar con un palillo en el centro, éste salga seco.

6. Deja reposar los bizcochos en una rejilla para que se enfríen por completo. Cuando estén fríos los podrás desmoldar más fácilmente sin que se te rompan. Nivélalos con una lira o un cuchillo de sierra para que todos tengan el mismo tamaño. También los puedes almibarar llevando a ebullición 100 ml de agua con 100 g de azúcar. Pínta los bizcochos con un pincel. Si quedan muy jugosos, no será necesario poner almíbar.

7. Prepara el relleno batiendo el dulce de leche con la nata bien fría. Déjala reposar un par de horas en la nevera para que ésta sea más consistente.

8. Para el montaje de la tarta, pon un disco plateado sobre una base giratoria, pon la primera capa de bizcocho y rellena con la crema de dulce de leche. Repite esta operación hasta completar las tres capas de bizcocho.

9. Pon una capa de ganache para sujetar las migas de la tarta. Esta capa no debe ser muy gruesa. Deja refrigerar en la nevera 20 minutos. Vuelve a poner una capa más gruesa de ganache y alísala con una espátula. Para conseguir bordes perfectos, sumerge la espátula en agua calienta y luego sécala. Este truco te ayudará a que el chocolate quede bien liso. Empieza haciendo el contorno y, por último, la parte superior.

10. Como toque final, decora la superficie de la tarta con unas rosas hechas con fondant o pasta de flores. Si las pintas con colorante en polvo y un pincel conseguirás un efecto mucho más realista. La puedes decorar también con una cinta de raso rodeando el contorno inferior de la tarta.

El resultado es esta tarta súper jugosa, muy chocolateada y con un sabor intenso a dulce de leche y chocolate.