El Pozo

Bizcocho de tres leches

INGREDIENTES PRINCIPALES

  • 4 huevos tamaño L a temperatura ambiente
  • 100 g de azúcar blanco
  • 1 cucharadita de vainilla en pasta
  • 120 g de harina de repostería
  • 1 pizca de sal
  • 200 g de leche condensada a temperatura ambiente
  • 200 g de leche evaporada a temperatura ambiente
  • 200 ml de nara para montar a temperatura ambiente

Preparación de la receta


Precalienta el horno a 180º C con calor por arriba y por abajo y con ventilador. Si no tienes ventilador, con calor sólo por abajo.

Separa las yemas de las claras y mezcla con unas varillas las yemas con el azúcar unos 15 minutos. Al no llevar levadura, necesitamos incorporar aire a la masa y eso sólo se consigue batiendo mucho.

Añade la pasta de vainilla y sigue batiendo.

Incorpora la harina tamizada y la sal y mezcla todo la espátula haciendo movimientos envolventes. No queremos perder aire en la masa.

Por último, monta las claras a punto de nieve y añádelas a la mezcla haciendo también movimientos envolventes.

Engrasa un molde con mantequilla o aceite y vierte la mezcla. Yo utilicé un molde circular desmoldable de unos 26 cm de diámetro.

Hornea colocando la bandeja en la parte central del horno durante 20 minutos aproximadamente. Pasado ese tiempo introduce un palillo, si sale seco, es que ya está hecho el bizcocho.

Coloca el bizcocho sobre una rejilla y deja enfriar un poco. (1)

Mientras, haz la mezcla de las tres leches. Echa la leche evaporada junto con la leche condensada y la nata en un recipiente y bate con las varillas hasta que estén bien mezcladas.

Desmolda el bizcocho y coloca un papel de horno en el mismo molde, para que no se pegue después. Vuelve a meter el bizcocho dentro del molde pero boca abajo. (2)

Con una aguja o un palillo de brocheta, pincha el bizcocho para que se introduzca bien la mezcla de las tres leches.

Vierte las tres leche sobre el bizcocho y déjalo reposar al menos una hora. (3)

Déjalo en el molde hasta justo antes de servir.

Da la vuelta al bizcocho y decóralo si quieres con un poco de azúcar glacé. (4)


Si tienes thermomix, puedes hacerlo así:

Precalienta el horno a 180º C con calor por arriba y por abajo y con ventilador. Sin no tiene ventilador, con calor sólo por abajo.

Coloca la mariposa y vierte los huevos junto con el azúcar y la vainilla. Programa 6 minutos a temperatura 37º C y velocidad 4.

Pasado el tiempo, vuelve a programar otros 6 minutos y velocidad 4, ahora sin temperatura.

Añade la harina tamizada junto con la sal y mezcla 4 segundos a velocidad 3.

Retira la mariposa y termina de mezclar utilizando la espátula y haciendo movimientos envolventes para que la masa no pierda aire.

Engrasa un molde, si es desmoldable mejor, y vierte la mezcla en él.

Hornea a temperatura 180º C con calor por arriba y por abajo y con ventilador durante unos 20 minutos. Pasado ese tiempo, introduce un palillo, si sale seco, es que ya está hecho.

Saca el bizcocho del horno y déjalo reposar dentro del mimo molde sobre una rejilla. (1)


Mientras, prepara la mezcla de las tres leches.

En el vaso limpio de la thermomix echa la leche condensada, la leche evaporada y la nata y mezcla 15 segundos a velocidad 4.

Desmolda el bizcocho y coloca un papel de horno en la base del mismo molde, es para que no se pegue después. Dale la vuelta al bizcocho e intrudúcelo dentro de ese molde. (2)

Pincha el bizcocho con una aguja o palillo de brocheta para que se introduzca bien, dentro del bizcocho, la mezcla de las tres leches.

Vierte la mezcla por todo el bizcocho y déjalo reposar al menos una hora.(3)

Deja el bizcocho dentro del molde hasta antes de servirlo.

Para servirlo, dale la vuelta al bizcocho y échale un poco de azúcar glacé para decorarlo. (4)


Foto del plato terminado:

Trucos

Es un bizcocho tipo genovés. Para que suba y quede esponjoso, al no llevar levadura, necesitas incorporar aire a la masa. Para incorporarlo hay que batir mucho.

El bizcocho se puede comer tal cual, sin tener que echarle la mezcla de las tres leches aunque ésas, le aportan una textura muy jugosa.

Al sacar el bizcocho del horno notarás que baja un poco. No te preocupes, al echarle la leche vuelve a subir.

Si no tienes leche evaporada puedes utilizar leche entera.

Si vas a decorarlo con azúcar glacé hazlo justo antes de servirlo. Si no, el bizcocho irá absorbiendo poco a poco el azúcar y no quedará tan bonito.
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