En boca de todos: Restaurante Jockey

Nos trasladamos hasta la calle Amador de los Ríos de Madrid para descubrirnos el restaurante Jockey, un restaurante de alta gastronomía en el que han comida grandes personalidades mundiales.

Fundado en el año 1945 por Clodoaldo Cortés, Jockey ha sido una referencia en la alta gastronomía y también por su decoración, el entorno y el servicio, equivalentes a los grandes restaurantes europeos de la época.

Ahora es Luis Eduardo Cortés, hijo del fundador, el que se ha hecho cargo de Jockey, que sufrió algunas reformas para adaptarse a la época. Allí nos recibe Javier Méndez-Monasterio, director gerente del restaurante, que nos cuenta cómo Jockey ha cambiado, sin perder la esencia, pero ganando en luminosidad.

Jockey ha hecho un trabajo de remodelación fantástico porque continúa sin perder el carácter de alto restaurante francés de alta gastronomía.

En Jockey trabajan nueve personas en sala para satisfacer las necesidad de todos los comensales. Javier asegura que Jockey lo siguen frecuentando “los de antes y los de ahora. Se nota que hay una nueva generación que empieza a venir a lo que ellos siempre denominaron el restaurante de sus padres o de sus abuelos”. 

Durante el medio día, la clientela que frecuenta Jockey está relacionada con el mundo de los negocios; ya, por la noche, el restaurante cuenta con una mezcla de familias y amigos, tanto de edad adulta como más joven.

Jockey, durante casi 30 años, se convirtió en el templo gastronómico de Madrid, al que venían todas las personalidades a nivel mundial. Prácticamente, hasta que no aparece en la capital el restaurante Zalacaín, Jockey era el único lugar con glamour donde realmente se entendió la alta cocina y la gran calidad de servicio.

Esta alta calidad hace que muchos vean inalcanzable degustar los platos de Jockey. “A través de una agencia de comunicación, intentamos salir en más medios, llegando a más público, pero respetando lo que es Jockey y su elitismo”, afirma Javier. Jockey trata de, sin ser informar, perder la pomposidad del protocolo. 

Esteban Sánchez, el jefe de cocina de Jockey, nos prepara un Rodaballo con aceite de albahaca y verduras tiernas, una de las especialidades de la casa, y nos confiesa que el producto más vendido en Jockey es el pescado “aunque también piden carne y la pularda se vende mucho”.