Tarta de crepes sueño de un goloso

•Previamente a hacer los crepes, necesitamos hacer los diferentes rellenos de los pisos, para que se enfríen y cuajen.

•Para el cuajado de queso, se calienta la mitad de la leche y cuando hierva, echaremos el resto de la leche, en la que habremos diluido anteriormente, el sobre de preparado para cuajada y las 2 cucharadas de miel. Cuando vuelva a hervir se retira del fuego, se añade el queso, se pasa por la batidora y se le añaden los piñones, se coloca en un molde cuadrado-redondo, para que quede un grosor de ½ a 1 cm. Se deja enfríar unas horas en el frigorífico.

•Para la gelatina de frutos del bosque, se echa el sobre de gelatina en 200 ml de agua y se lleva a ebullición, llegado a este punto se retira del fuego, se deja enfríar 1 minuto y se le añaden las frutas troceadas. Se pone en un molde del mismo tamaño que el anterior, para que quede también un grosor de ½ cm, dejándolo enfríar en el frigorífico, hasta que cuaje.

•Para la crema de chocolate, se coge la mitad de la leche, se pone a hervir con las hojas de menta, para que coja sabor y en el resto se diluye el sobre de preparado de flan y el cacao puro. Se echa sobre la leche caliente a la que habremos retirado ya las hojas de menta, hasta que vuelva a hervir, removiendo continuamente. Se coloca en un molde, de la misma manera que los anteriores y se deja que se enfríe hasta que cuaje.

•Para el helado de pistacho, ponemos a hervir los 200 ml de leche con la nata y el azúcar en un cazo mediano. Aparte, en otro cuenco batimos ligeramente las yemas. En un vaso, unimos los 50 ml de leche con la maizena, y removemos con una cuchara hasta que esté completamente disuelta, Añadimos las yemas. Vertemos la leche y la nata hirviendo sobre esta mezcla, mientras que removemos sin cesar. Colamos esta mezcla para retirar posibles restos de yema de huevo que hayan cuajado, y llevamos de nuevo a fuego medio.Debemos remover constantemente con una cuchara de madera, hasta que la crema espese ligeramente. Se comprueba fácilmente porque al pasar el dedo por la cuchara, queda la señal por donde hemos pasado el dedo. Retiramos la crema del fuego, añadimos la pasta de pistacho y el colorante si lo vamos a usar, y mezclamos bien. Dejamos enfriar esta crema de pistacho en el frigorífico al menos 24 horas. Al día siguiente, con un batidor de varillas eléctrico, montamos los 250 ml de nata restantes. La nata deberá estar muy fría. Mezclamos la nata montada con la base del helado de pistacho que habíamos reservado en el frigorífico el día anterior. Vertemos esta mezcla en la máquina de hacer helados, para que manteque durante unos 30 minutos (dependerá de las instrucciones del fabricante), y conservamos en el congelador en un recipiente hermético. Es preferible sacarlo 5 minutos antes de consumirlo.

•Para realizar los crepes, se mezclan todos los ingredientes con la ayuda de un batidor hasta que quede una masa homogénea. En una sartén con un poco de mantequilla, se echa con la ayuda de un cucharón, un poco de masa, haciendola por ambos lados (más/menos 1 minuto por cada lado), despreciando la primera tortita, porque absorberá la mayor parte de la mantequilla. Tendrán que salir 4 o 5 tortitas aprovechables.

•Para la presentación del plato, se coge una tortita se pone sobre el molde, donde tengamos el cuajado de queso y le damos la vuelta, para que queda la tortita debajo y lo colocamos sobre un plato. Sobre este repetimos la operación, para que quede la tortita y la gelatina de frutos del bosque, encima del cuajado y sobre la gelatina, tiene que quedar una tortita y la crema de chocolate, cubriendo con una tortita por encima.

•En el microondas se mezcla ½ vasito de leche con la tableta de chocolate blanco y se echa por encima de la tarta de crepes

•Con ayuda de un molde en forma triangular o el que tengamos, se rellena de helado de pistacho, para que quede una forma singular y se espolvorea con pistacho molido, por encima. Se termina de adornar con unos frutos rojos y una ramita de hierbabuena.

•Como se ve el plato, queda contundente y calórico, no apto para regimenes ni diabéticos, pero delicioso y exquisito, para compartir entre varios.