Manzanas de caramelo

Primero de todo... Esto no es una receta para hacer con niños, el caramelo es bastante peligroso de trabajar, asi que hay que tener mucho cuidado con sus quemaduras. Para los niños dejais el arte de envolver y decorarlas :)

El primer paso es lavar las manzanas bien y retirar el rabito. Hay que secarlas muy bien, ya que si quedan gotas luego chisporrotean al echar el caramelo y quedan burbujas o agujeritos.
Se le clava un palo, yo cogí palos de comida china... los de brocheta me parecian demasiado debiles.

Se pone el azúcar en un cazo a cocer a fuego suave, con unas gotitas de agua o limón, hasta conseguir un punto de caramelo fuerte, no ha de coger color, tendrá unos 140 a 150ºC, si coges una gota de caramelo y la dejas caer en un vaso de agua fría se cuajara y quedara duro, no se pega en los dientes. Aparta del fuego y echa el colorante si es en gel, si es liquido echalo al principio con las gotas de agua.

Coloca la manzana sujeta por el palo sobre el cazo y con una cuchara la vas bañando bien, que quede bien cubierta. Dejala escurrir un poco y la dejas enfriar sobre un silpat o papel vegetal.

Se enfría bastante rápido, no las dejes al aire una vez bañadas durante mucho tiempo, cubrelas con una bolsa plastica o el caramelo se reblandecerá.