De vinos - Rarezas
Lengua electrónica para el cava
10 de febrero de 2012
La lengua electrónica simula una lengua humana. Cada sensor se puede comparar a una pupila gustativa que emite información sobre compuestos oxidables en el cava, como pueden ser los azúcares, los fenoles y los polifenoles.
Es necesario entrenar esta lengua, como se formaría un somelier. El primer paso es hacer que la lengua identifique diferentes tipos de cava e indicarle cuál es.
A través de un procesamiento avanzado basado en herramientas de inteligencia artificial, el sistema identifica el tipo de cava, según las categorías por las que se ha entrenado, que son el brut, el brut nature y el semi seco.
El mecanismo de la lengua electrónica para el análisis de cavas y vinos lo ha desarrollado el Grupo de Sensores y Biosensores del Departamento de Química la Universidad Autónoma de Barcelona. Los investigadores aseguran que a parte de determinar el tipo de cava, se puede desarrollar para conseguir más información.
Ahora se trabajará para hacer más sofisticada la lengua y conseguir aplicaciones más complejas en el mundo del vino y del cava, y conseguir, así, identificar variedades, adulteraciones, defectos de fabricación y fraudes.