De vinos - Palabra de Baco
Luis Alonso-Lasheras, propietario de Vinarium
27 de marzo de 2009
Luis Alonso-Lasheras, propietario de Vinarium, un espacio que lleva poco tiempo.
Sí, llevamos desde noviembre de 2007.
¿Cuál es vuestra oferta?
Nuestra oferta es ofrecer un espacio bastante acogedor en pleno centro de Madrid, con una selección de vinos que sin ser muy amplia es bastante heterogénea, hay un poco de todo y a unos precios competitivos, y también queremos darle el aliciente de organizar cursos de cata, presentaciones de bodegas, hacerlo un punto de encuentro de los amantes del vino de la zona y de Madrid.
Por el poco tiempo que lleváis aquí, ¿habéis visto alguna preferencia entre el consumidor?
No especialmente. Nosotros tenemos una creencia en los vinos gallegos porque los que hemos montado esto somos medio gallegos, entonces hacemos casi sin querer un poco de imán de los gallegos de Madrid, que además son muchos. Pero en general vendemos de todo, el Rioja y el Ribera siempre son los protagonistas.
¿Cuáles serían vuestras joyas de la corona?
Nosotros tenemos un par de vinos blancos gallegos que además están poco distribuidos y son poco conocidos en Madrid, son el Sunum Ribeiro y el Birrei Albariño, dos vinos que nosotros movemos mucho y que posiblemente no se encuentren en otros sitios. También, tenemos un vino de la tierra de Castilla y León que se llama Quinta Sardonia, que va siendo conocido y es muy bueno. Además, de cada denominación tenemos algún vino con el que pensamos que se puede sorprender al cliente.
¿Atendéis peticiones concretas del cliente?
Nosotros en esta primera fase vamos incorporando referencias poco a poco, algunas de ellas las hemos incorporado a raíz de algún cliente que nos lo ha recomendado o nos lo ha traído para probar. Nos interesa mucho que sea el cliente el que nos enseñe. Escuchamos peticiones, pero siempre tiene que haber un mínimo o tiene que ser un vino que nos interese incorporar.
Y además de vino en este establecimiento encontramos licores, productos gourmet y por ejemplo, accesorios, como la nariz del vino.
Ésta es un poco la biblia de los aromas del vino, además es la que tiene los aromas más puros, y es una forma increíble de reconocer los aromas dentro de los vinos. Es una especie de juego que consiste en olor uno de los francos al azar y tratar de averiguar qué aroma es, esto es un aroma concentrado, pero luego cuando lo hueles en el vino los vas reconociendo poco a poco. El juego en sí no es muy difícil, lo que es difícil es reconocer esos aromas en el vino, pero es cuestión de práctica.
Y esto es un trivial, pero especializado en el mundo del vino.
Esto es ya para los muy aficionados, para gente que realmente disfrute mucho con la cultura del vino. Consiste en hacer un trivial en el que todas las preguntas son sobre el vino.