En primer lugar, ponemos dos ollas al fuego, una con agua y otra con aceite de oliva.

Lavamos bien el pescado con agua, le retiramos la cabeza y las espinas laterales y central, pero le dejamos la cola. Sacamos los lomos con piel y los cortamos en pedazos de bocado. Reservamos.

Introducimos la espina central del pescado en la olla con agua al fuego. La cocemos y cuando esté blanca, la escurrimos.

A continuación, pelamos el daikon y con una brocheta de madera le hacemos cuatro orificios e introducimos las guindillas secas dentro del daikon. Reservamos en la nevera durante 15 minutos.

Pasado el tiempo, lo rallamos junto las guindillas en un bol. Incorporamos el ajo picado, la salsa de soja y el vinagre de arroz. Mezclamos y reservamos la salsa.

Añadimos una pizca de sal, azúcar y ajinomoto a los lomos de pescado. Rebozamos con la fécula de maíz y reservamos. Rebozamos la espina cocida del lenguado también.

En la olla con aceite freímos el pescado hasta que esté muy crujiente. Lo escurrimos y reservamos.

Freímos la espina hasta que esté dorada, la retiramos del aceite y esperamos 5 minutos. Pasado el tiempo la volvemos a freír para que quede muy crujiente.

Insertamos una brocheta en la espina del pescado para que quede en forma de barca e introducimos el pescado dentro. Acompañamos con el mezclum de lechuga aliñado y con la salsa.