Limpiamos muy bien el calamar sin romperlo, quitamos las telillas, las patas y las alas.

Limpiamos los calamares pequeños y los picamos junto con alas y las patas del calamar grande, los huevos duros, la sobrasada, el ajo, el perejil, la sal, la nuez moscada y un poco de aceite de oliva. No tiene que ser una mezcla fina. Deben verse trocitos pequeños

Incorporamos pan rallado a esa masa hasta que coja consistencia espesa.

Rellenamos los calamares y los cerramos bien cosiéndolos con palillos.

Los doramos en aceite y cubrimos hasta la mitad con leche entera en la misma sartén alta o rondón.

Vamos moviéndolos para que no se peguen, y pinchándolos para que suelten su grasa y su sabor. Al pincharlos saldrá un chorro de su interior, por lo que hay que tener cuidado para no quemarnos.

Deben estar a fuego suave unas 2 horas, hasta que la leche haya espesado y coagulado y la grasa se haya quedado arriba.

Los sacamos y reservamos en frío para que el relleno coja consistencia.

Cocemos las patatas peladas y en rodajas en esa leche y rectificamos de sal. Quedan perfectas si se cortan del mismo tamaño con un cortapastas redondo.

Podemos triturar la leche al final para que quede más fina.

Emplatamos poniendo las patatas y encima el calamar en rodajas. Tapamos con la salsa. Terminamos poniendo unas hojas de perejil y flores de ajo.

En este episodio de Blanca Navidad, la cocinera Blanca Mayandía también nos enseña a preparar la receta de Barbaguian de verdura con salsa de queso Mahón.