Para preparar la base de la tarta, mezclamos en un recipiente 3 medidas de harina, 1 medida de zumo de manzana, media medida de aceite de oliva y sal. Amasamos bien y hacemos una bola con la masa.

Para extenderla, podemos utilizar un rodillo. Después, en un molde para horno que previamente hemos untado con aceite, colocamos la masa. De esta forma, no se pegará al recipiente.

Metemos en el horno durante 10 - 12 minutos.

Mientras, cocinamos a fuego lento y tapado la manzana, con un poquito de sal. La dejamos que se haga durante 30 - 45 minutos. Así haremos la compota.

Cuando esté la masa preparada, ponemos por encima la compota de manzana.

Por otro lado, pelamos una manzana y la cortamos en cuartos. Además, esos cuartos los cortamos en tiras muy finas que colocamos por encima de la compota.

Disolvemos el kuzu con ½ vaso de zumo de manzana y lo ponemos por encima de la tarta para abrillantar.

Horneamos otra vez durante 1 minuto.

Para presentar, decoramos con unas almendras picadas por encima.