Macarons de mandarina Por:
Claves
Ingr. prin.:Otros
Plato:Postre
Estilo: Cocina dulce,
Ambiente: Celebraciones,
Tiempo: alto
Dificultad: alto
Ingredientes principales
70g Claras de huevo
150g Azúcar glass
30g Azúcar blanca
80g Harina de almendras
1/4 cdta Colorante en pasta naranja
400g Chocolate blanco
200ml Nata o crema para batir
1 cdta Esencia de mandarina
  1. Receta paso a paso
  2. El primer paso es tamizar la harina de almendras dos veces. Este paso es muy importante porque al dejarla bien finita, conseguiremos que los macarons tengan una superficie lisa.

    También tamizamos el azúcar glass para asegurarnos de que todo este muy fino. Mezclamos la harina de almendras con el azúcar glass y reservamos.

    En un bol limpio y seco, batimos las claras.

    Pasados un par de minutos, las claras estarán a medio montar. Tendrán una textura parecida a la espuma. Este es el momento de añadir el azúcar.

    Seguimos batiendo hasta que las claras estén montadas. Sabremos que están en su punto cuando hacen ese piquito tan característico llamado “pico de loro”.

    Para darle color, usamos colorante en pasta. Con un poquito veréis como se tiñe todo con un color naranja intenso. Yo no recomiendo usar colorantes líquidos porque aportan agua a las claras y nos aguarán la mezcla. Cuando agreguemos el colorante lo batimos por poquito tiempo. Lo justo para que el color se integre completamente.

    Poco a poco vamos añadiendo la mezcla de harina de almendras y azúcar glass. Y con cuidado, lo integramos todo con la ayuda de una lengua repostera.

    Debemos hacerlo con movimientos envolventes para mantener la textura de la mezcla. Antes de añadir la siguiente ración de harina de almendras y azúcar glass, debemos asegurarnos de que se haya absorvido la ración anterior. Una vez hayamos integrado bien todos los ingredientes, debemos trabajar la consistencia. Mucho cuidado en este punto, porque si nos excedemos en el tiempo de mezclado, nos quedará demasiado líquida. Y ahí si ya no tiene remedio. Tendremos que volver a empezar desde el principio. Lo ideal es dejar la mezcla en punto de cinta. Así que dejadla caer un poco y mirad la consistencia. Si cae en forma de cinta, ya la tenéis lista!

    Preparamos una manga con una boquilla redonda. Si no tenéis boquilla de este tipo, podéis preparar una manga sin boquilla y cortar el piquito. Si tenéis molde para macarons, genial, pero si no, preparamos una bandeja con una guía y el papel vegetal o de horno. Para que nos queden unos macarons bien redonditos, debemos poner la manga en posición vertical. Aseguraos de dejar suficiente espacio entre ellos ya que la masa del macaron se expande. Y como se empiecen a tocar en entre sí, tendréis un solo macaron gigante.

    Para sacar las posibles burbujitas de los macarons, golpeamos con fuerza la bandeja sobre la mesa de trabajo.

    Dejamos secar entre media hora y 2 horas según la humedad de vuestra ciudad. En este caso, tardaron 1 hora en secarse. Comprobamos que nuestros macarons están secos tocando la superficie de la concha con cuidado. Si no nos manchamos, es que ya están listos para ser horneados!

    Los ponemos en el tercio inferior del horno y los horneamos a 150 grados durante 10 minutos.

    Recién sacados del horno, los dejamos reposar para que enfríen por completo...y cuando ya estén totalmente fríos, los despegamos con cuidado.

    Para el relleno de los macarons, sin duda alguna, prefiero la ganache de chocolate. Que en este caso es de chocolate blanco. Para hacer la ganache primero calentamos la nata o crema para batir en el microondas. Cuando empiece a hervir la retiramos del microondas y la vertemos sobre el chocolate troceado.

    Lo dejamos reposar 1 minuto. Y luego con la ayuda de unas varillas removemos bien hasta que el chocolate y la nata se hayan integrado perfectamente.

    Para saborizarla le he puesto esencia de mandarina.

    Removemos nuevamente hasta que el saborizante esté completamente incorporado. Tapamos con papel film y lo dejaremos reposar en la nevera un mínimo de 2 horas. Una vez la mezcla esté bien fría, montamos la ganache con la ayuda de una batidora eléctrica batiéndola durante 1 minuto.

    Ponemos un poquito de ganache en el centro de la concha de macaron

    Presionamos con la otra concha con cuidado para que no se desborde la ganache.

    Los macarons son unas pequeñas delicias tremendamente ricas a las que no os podréis resistir. Eso sí, si estáis a dieta ni intentéis probarlos. Porque ya os digo que no seréis capaces de comer sólo uno.