Verdinas con cigalas y almejas Por: Loleta, Lola Bernabé López-Cózar
Claves
Ingr. prin.:Legumbres
Plato:Plato único
Estilo: Cocina casera, Cocina española, Sin gluten,
Ambiente: De la abuela, Friends, Navideña,
Tiempo: alto
Dificultad: alto
Ingredientes principales
500 g de verdinas
500 g de almejas de carril
1 chorro de vino fino o manzanilla
8 Cigalas
3 cucharadas de concentrado de tomate
1 Puerro
1 Cebolleta
2 hojas de laurel
100 ml de aceite
1 chorrito de coñac (opcional)
  1. Preparación de la receta
  2. Debemos poner en remojo las judías verdinas durante al menos 12 horas. Lo mejor es ponerlas la noche anterior a preparar nuestra receta.

  3. En primer lugar, preparamos el sofrito picando la cebolleta y el puerro. También tenemos que limpiar las cigalas, reservando las cáscaras y cabezas por un lado y los cuerpos limpios y troceados por otro.

  4. Ponemos en el fuego una cacerola grande con un litro y medio de agua y la dejamos a hervir.

  5. A continuación, en otra olla grande con un chorrito de aceite, salteamos las cabezas de las cigalas aplastando bien con una cuchara de madera para que expulsen el jugo y den más sabor. Añadimos un chorrito de coñac y volcamos el litro y medio de agua que teníamos en la otra cacerola hirviendo. Dejamos hervir las cáscaras durante 5 minutos para obtener todo su sabor.

  6. Mientras tanto, en otra olla alta, pochamos la cebolleta picada y el puerro.

  7. Incluimos las hojas de laurel, la sal y el tomate a la olla y rehogamos un par de minutos. Añadimos entonces las verdinas y las mezclamos.

  8. Volcamos el caldo de las cigalas en la olla, que ya estará listo, y las hervimos a fuego medio-bajo durante aproximadamente dos horas y media hasta que el caldo rebaje y las verdinas estén tiernas.

  9. En una sartén grande aparte, añadimos un chorro de aceite y doramos los ajos picados. Una vez dorados, añadimos las almejas. Las salteamos y rociamos con vino blanco hasta que empiecen a abrirse. Volcamos la sartén sobre la olla de las verdinas.

  10. En la misma sartén, salteamos las cigalas troceadas, y, cuando estén doradas, las incluimos a las verdinas. Rectificamos de sal si fuera necesario.

  11. Servimos.