En primer lugar, pelamos las zanahorias, los calabacines y las cebollas. Cortamos todas las verduras en bastoncitos.

Ponemos a pochar la cebolla en una sartén con aceite. Cuando coja color, incorporamos los bastones de zanahoria.

En una cazuela con agua salada hirviendo, ponemos a escaldar los tirabeques durante tres minutos.

Por otro lado, retiramos las hojas de los tomates y les hacemos un corte en forma de cruz. Los escaldamos en agua hirviendo para poder retirar con facilidad la piel. Cuando estén listos, los metemos en agua con hielo para cortar la cocción. Reservamos.

Troceamos la guindilla verde en rodajas pequeñas y la incorporamos a la sartén de las cebollas junto con los calabacines, el limón encurtido, una cucharadita de ras el hanout y un poco de jengibre rallado.

Pelamos los tomates, les quitamos las semillas, los troceamos y los añadimos a nuestro guiso. Incorporamos también los tirabeques. Dejamos guisar durante 25 minutos.

Cuando todas las verduras han soltado toda su agua, regamos con el caldo y espolvoreamos con cilantro picado.

Retiramos la piel del San Pedro y lo cortamos en taquitos. Cuando nuestro guiso rompa a hervir, añadimos los trozos de pescado y dejamos cocinar 4 minutos. Rectificamos de sal y pimienta.

Emplatamos y servimos.