Limpiar los mejillones de impurezas y reservar. Mantener las almejas en agua con sal, una media hora para que pierdan la posible arenilla que traigan en su interior. Pelar los langostinos y reservar. Cortar en trozos pequeños el pescado (con cuidado de que no tenga espina), los trozos de jibia y los trozos de calamar. Reservar. Antiguamente mi madre hacia la mayonesa a mano, con las yemas, echándole un hilito de aceite (que ponia en la cáscara del huevo) poco a poco, con un tenedor, hasta que quedaba bien espesa. Hoy, les aconsejo: Preparar una mayonesa con las dos yemas y una clara, con aceite de oliva virgen y un poco de sal y reservar. La otra clara del huevo, ponerla en un vaso y reservarla igualmente. En una cacerola plana con dos litros de agua aproximadamente poner a hervir la espina de la rosada, los mejillones y las almejas. Espumerear y cuando estén abiertos los moluscos, sacar de la olla. Quitarles las conchas y reservar la carne de las almejas y de los mejillones. Retirar la espina de la rosada y si es necesario colar el caldo. Poner en la cacerola la jibia y los trozos de calamar y dejar hervir unos diez minutos. Echar una patata cortada a cascos; cuando ésta esté tierna, agregar los dos puñaditos de arroz, dejándo hervir unos quince minutos. Añadir los langostinos, el pescado y los chicharos (los guisantes). Probar de sal. Dejar cocer unos cinco minutos, pasado éste tiempo añadir la clara de huevo y sin remover dejar que cuaje. Agregar la carne de las almejas y los mejillones. Apartar del fuego y echar un buen chorreón de vino amontillado, a ser posible Viña AB.