En un cazo dejamos hirviendo el vino blanco para reducir el alcohol. Cogemos las especias (romero, laurel, tomillo, pimienta) junto con perejil, ajo, guindilla y un pellizco de sal y vinagre y lo trituramos todo añadiendo un chorrito de agua. Si la salsa queda ligera, añadimos cebolla para que engorde.

Al muslo de pollo le quitamos la piel y la máxima cantidad de grasa posible y lo deshuesamos. Para ello cortamos los tendones con el cuchillo bien pegado al hueso y raspando hacia abajo para conseguir sólo la carne.

Una vez que tenemos el muslo de pollo deshuesado, cogemos la salsa de las especias que hemos triturado anteriormente, y la echamos sobre el muslo hasta cubrirlo, guardando el resto de la salsa para emplatar. Lo metemos al horno unos 12-15 minutos a la máxima potencia.

Mientras, en una sartén con muy poco aceite, freímos las verduras. Cortamos en rodajas la berenjena y el calabacín, las untamos con salsa de soja y a la sartén. A las cebolletas les hacemos un corte para conseguir que se doren por fuera y se hagan por dentro. También cortamos rodajas de pimiento rojo y lo dejamos freír todo unos 7 minutos a fuego medio.

Cuando las verduras estén listas y el pollo horneado, emplatamos con la salsa de especias.