Primero, fundimos la mantequilla y vamos pintando con ella cada una de las láminas de pasta filo. Después, las espolvoreamos con azúcar glasé y colocamos otra lámina encima, pintamos con mantequilla y espolvoreamos con azúcar glasé y las tapamos con papel de horno.

Las horneamos a 180º C durante 5-6 minutos o hasta que se doren.

Por otro lado, cortamos el mango en láminas finas y lo doramos en una sartén con mantequilla y azúcar durante 10 minutos.

Montamos las milhojas alternando los triángulos de pasta con las rodajas de fruta, espolvoreamos con azúcar glasé y servimos.