Loving red velvet cake Por:
Claves
Ingr. prin.:Huevos y Lácteos
Plato:Postre
Estilo: Cocina americana,
Ambiente: Celebraciones,
Tiempo: alto
Dificultad: medio
Ingredientes principales
300 g harina de reposteria
250 g azucar blanco
2 huevos
3 cucharadas cacao en polvo
120 ml aceite de girasol
220 ml suero de leche (leche zumo de limon)
2 cucharadas colorante rojo en gel
2 cucharadas extracto de vainilla
1 chorrito vinagre
1 cucharada bicarbonato sodico
1 pizca sal
500 g azucar glas
250 g mantequilla
225 g queso de untar
1 cucharada queso de cabra
1/2 tableta chocolate negro
1/2 tableta chocolate con leche
1/2 tableta chocolate blanco
un poco de frutos secos
un poco de toppings para decorar
  1. Receta paso a paso
  2. Antes de nada, precalentamos el horno a unos 200º y mezclamos la leche con el zumo de medio limón, y lo dejamos reposar durante unos 15 minutos hasta que tenga el aspecto como de cortado.
    Empezamos con el bizcocho. Primero batimos los ingredientes líquidos, reservando el vinagre para más tarde.

    Tamizamos y añadimos los ingredientes secos, salvo el bicarbonato sódico.
    En cuanto al cacao en polvo, mi consejo es que añadáis una cucharadita antes de usar el colorante, y una vez obtenido el tono que queréis, añadir las otras dos cucharaditas. Es preferible, porque así controláis mejor si os pasáis con el cacao y el rojo queda demasiado oscuro. Una vez hecho esto y antes de añadir el colorante, mezclamos a parte el chorrito de vinagre con el bicarbonato sódico y cuando burbujee, lo añadimos a la mezcla.

    Ahora, añadimos el colorante y mezclamos bien.
    Recordad que cuanto más concentrado esté el colorante, más teñirá, por eso no recomiendo colorantes líquidos. Son mejores los colorantes en gel o en pasta.

    Engrasamos el molde, echamos la mezcla, y lo metemos en el horno 55 minutos a 200º.
    El tiempo y la temperatura variará según vuestro horno. El mío es un poco flojo, así que tuve que dejarlo más tiempo.

    Para hacer el frosting, mezclamos mantequilla en pomada con el azúcar glas tamizado. Batimos con varillas hasta que quede todo integrado pero consistente.
    Es importante añadir el azúcar poco a poco, sobretodo si no tenéis batidora amasadora como yo, la cocina se pone perdida. El azúcar glas lo hice en un robot de cocina. Si se hace de este modo hay que tener mucha precaución a la hora de triturar el azúcar, debe estar totalmente triturado, ya que si nos dejamos algún granito más grande de lo normal, el glaseado nos quedará granulado y resultará más desagradable y difícil de manejar para decorar.

    Para las piruletas, primero troceamos el chocolate.

    Fundimos el chocolate en un baño maría. Para ello llenamos un cazo con un par de vasos de agua y calentamos a fuego lento. Introducimos el cuenco con el chocolate, con cuidado de que no entre agua para que no se estropee.

    Dejamos templar el chocolate hasta que quede más espeso y con una temperatura entre 30º-35º. Esto es importante porque si tratamos de hacer una figura con el chocolate recién fundido, éste estará demasiado líquido, y nos dificultará el trabajo.
    Si está un poquito espeso es más sencillo hacer nuestros corazones.

    Introducimos en la manga pastelera el chocolate y en un papel vegetal hacemos los corazones. Para ello realizamos un corte pequeño en la punta de la manga, y empezamos a hacer el corazón desde unos dos dedos más abajo del pincho de madera, para asegurarnos de que cuando seque no se caerá.

    Decoramos los corazones con frutas y toppings, e introducimos en la nevera durante unos 10-15 minutos. Yo utilicé para decorarlos plátano deshidratado y toppings de corazones.

    Para la decoración, primero cortamos el bizcocho por la mitad con una lira o un cuchillo de sierra (en este caso, para que sea más fácil, vamos girando el bizcocho mientras cortamos, hasta llegar al centro). Recortamos también la parte de arriba sobresaliente del bizcocho.
    Con el frosting, rellenamos y cubrimos todo el bizcocho.
    Trituramos la parte de arriba que recortamos previamente y lo esparcimos por toda la parte de arriba.
    Con una manga y una boquilla redonda, realizamos pétalos alrededor del bizcocho, ayudándonos con un cuchillo o espátula para extender los puntos que vamos haciendo con la manga.
    Finalmente, colocamos las piruletas a nuestro gusto.