Precalentamos el horno a 190C y forramos 2 bandejas para hornear con papel vegetal.

Comenzamos con la mantequilla tostada, fundimos la mantequilla en una cacerola a fuego alto hasta que la espuma desaparezca y se formen unos trozos marrones en el fondo, de 3 a 4 minutos. Echamos el azúcar marrón y blanquilla en un bol grande y añadimos la mantequilla (incluidos los trozos marrones). Mezclamos bien todos los ingredientes. Añadimos la salsa de caramelo (o dulce de leche). Es posible que la mezcla no se vea suave, pero lo hará una vez que se agreguen los ingredientes secos.

Incorporamos el huevo y la vainilla seguidos de la harina, la avena, la maicena, el bicarbonato de sodio y ½ cucharadita de sal. Mezclamos hasta que estén bien combinados y agregamos las pepitas de chocolate y de caramelo salado (si las usamos). Ponemos bolitas de masa raciones en las bandejas para hornear, dejando 5 cm entre ellas. Las aplanamos con la palma de la mano y espolvoreamos ligeramente con sal marina.

Horneamos durante 8 a 10 minutos. A 190ºC Al sacarlas le damos a cada bandeja un golpe seco para que las galletas queden tiernas por dentro.

Las galletas se conservarán hasta 4 días en un recipiente hermético.