Primero, ponemos los huesos en una cazuela con 10 g de pimienta negra y una pizca de sal. Lo cubrimos con agua. Cuando empiece a hervir, lo dejamos cocer a fuego bajo durante 1 hora. Retiramos los huesos y filtramos el caldo.

Por otro lado,cortamos en juliana las cebollas y picamos los dientes de ajo. Pelamos también los tomates, les retiramos las semillas y los cortamos en dados. Cortamos los plátanos en rodajas y la piña y las manzanas en dados.

Después, doramos los tozos de cordero por todas sus caras en una cazuela con 2 cucharadas de aceite.

Echamos en otra cazuela el aceite restante y rehogamos las cebollas y los ajos. Añadimos el curry, la cúrcuma, las hojitas de tomillo y los dados de tomate y dejamos cocer a fuego bajo hasta obtener una compota.

Incorporamos el vino blanco y dejamos reducir 2 minutos a fuego vivo.

Agregamos, a continuación, los trozos de cordero con su jugo de cocción, bañamos con la leche de coco y mezclamos bien.

Añadimos los plátanos, la piña, las manzanas y las pasas y lo llevamos todo a ebullición. Mezclamos bien y dejamos cocer 5 minutos más.

Cocemos el arroz en abundante agua salada hirviendo durante 25 minutos.

Servimos el cordero, acompañamos con el arroz y decoramos con el cilantro.