Cupcakes de San Valentín con sorpresa de corazón Por: Alma Obregón
Claves
Ingr. prin.:Huevos y Lácteos
Plato:Postre
Estilo: Cocina dulce,
Ambiente: Celebraciones, Pija, Romántica,
Tiempo: medio
Dificultad: medio
Ingredientes principales

Para los bizcochos:

150 ml de aceite suave de oliva
300 g de azúcar blanco
4 huevos
300 g de harina
2,5 cucharaditas de levadura química
150 ml de leche
2 cucharaditas de vainilla en pasta
Colorante rojo extra en pasta
Para la crema:
25 g harina
160 ml de leche
115 g de azúcar
190 g de mantequilla a temperatura ambiente
2 cucharaditas de vainilla en pasta o extracto
  1. Preparación de la receta
  2. En un bol, mezclamos bien el aceite con el azúcar y los huevos. Incorporamos la vainilla y removemos hasta tener una mezcla homogénea.

  3. Tamizamos la harina junto con la levadura y la añadimos a la mezcla anterior. Removemos mientras incorporamos la leche poco a poco, hasta tener una masa homogénea.

  4. Pesamos la masa y separamos un tercio. Reservamos el resto de la masa.

  5. Este tercio lo teñimos con colorante extra rojo.

  6. Precalentamos el horno a 180º (calor arriba y abajo).

  7. Engrasamos un molde rectangular y ponemos papel de horno en la base, para facilitar el desmoldado.

  8. Vertemos la masa en él. Horneamos el bizcocho rojo durante 15-18 minutos o hasta que al pincharlo con un palillo salga limpio.

  9. Una vez esté templado, lo desmoldamos y dejamos que se enfríe sobre una rejilla.

  10. Cortamos 12 corazones con nuestro cortador (os sobrará bizcocho, podéis hacer más corazones y congelarlos para usarlos en otra ocasión).

  11. Ahora sí, cogemos el resto de la masa y la repartimos entre las 12 cápsulas.

  12. Echaremos un poquito menos de lo que estamos acostumbrados. A continuación, colocamos un corazón en cada cupcake y finalmente echamos un poquito más de masa encima.

  13. Horneamos 18-20 minutos o hasta que estén hechos (tardan menos de lo normal, al tener ya una parte horneada).

  14. Dejamos enfriar sobre una rejilla.

  15. Para la crema: Mezclamos la harina con la leche tibia y el azúcar hasta que no haya ningún grumo. Calentamos sin dejar de remover hasta obtener una bechamel un poco gordita.

  16. Lo ideal es alcanzar los 74º como mínimo, para eliminar cualquier problema de riesgo alimentario. Seguimos removiendo hasta tener una crema espesa.

  17. Dejamos enfriar, cubierta con un film "a piel" hasta que vuelva a temperatura ambiente. Mientras tanto, batimos la mantequilla con las varillas hasta que se aclare y esté bien aireada.

  18. Bajamos la velocidad y vamos añadiendo la bechamel poco a poco hasta lograr una crema suave y sedosa. En este punto añadimos la vainilla si la queremos usar.