Cupcakes de chocolate

Precalentamos el horno a 180 ° C y forramos un molde de 12 cupcakes con 12 capsulas de papel o papel de aluminio.

Para los cupcakes, tamizamos la harina, el azúcar, el cacao en polvo, la levadura en polvo y la sal en un bol grande. En un recipiente aparte, mezclamos la crema agria, el aceite, los huevos y la vainilla. Añadimos la mezcla a la harina y batimos bien con la mano durante un minuto, hasta que quede suave. Vertemos la masa en los moldes (llenando unos 2/3 de cada cápsula). Horneamos los cupcakes durante unos 25 minutos a 180º.

Retiramos del horno y dejamos enfriar en sus moldes durante 15 minutos antes de sacarlos para que se enfríen completamente antes de glasear. Los cupcakes se pueden almacenar en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante un día o, si los congelamos, hasta durante 3 meses. (Los cupcakes congelados se mantendrán en un recipiente hermético en la nevera hasta por 2 días, pero no se recomienda congelarlos de nuevo).

Glaseado de vainilla

Para el glaseado de vainilla, usando una batidora eléctrica con el accesorio de pala, batimos la mantequilla a alta velocidad durante 2 minutos, hasta que quede esponjosa. Agregamos la mitad del azúcar glas y volvemos a batir, comenzando a baja velocidad y aumentando a alta, deteniéndose de vez en cuando para quitar los residuos de las paredes del recipiente.

Incorporamos el resto del azúcar glas y la sal, y seguimos batiendo a baja velocidad y aumentando a alta. Añadimos la leche y la vainilla y volvemos batir primero a velocidad baja y luego aumentando a alta. Batimos el glaseado durante 3 o 4 minutos hasta que quede esponjoso y ligero. Podemos añadir unas gotas de colorante alimentario si lo deseamos.

Ponemos el glaseado en una manga pastelera con la boquilla grande y decoramos los cupcakes. Espolvoreamos con las virutas de colores.