Bocaditos sacher-nuez Por:
Claves
Ingr. prin.:Chocolate
Plato:Postre
Estilo: Cocina del mundo,
Ambiente: Celebraciones,
Tiempo: alto
Dificultad: medio
Ingredientes principales
Para el pastel. molde cuadrado 21x21 cm.
150 gr. Chocolate de cobertura
150 gr. mantequilla a temperatura ambiente
150 gr. azúcar
65 gr. harina
65 gr. nueces molidas
1 cdta. levadura química
5 huevos
1 cdta, pasta de vainilla
1 pizca de sal
Mermelada de fresa para el relleno
Para la cobertura
150 gr. de chocolate de cobertura
100 gr. nata para montar
40 gr. nueces en mitades para decorar
  1. Receta paso a paso


  2. En primer lugar disponemos los ingredientes y vamos separando las claras de las yemas en diferentes recipientes. Montamos las claras a punto de nieve y reservamos. Disolvemos el chocolate al baño maría con un poco de mantequilla.

    Trituramos las nueces con un molinillo o picadora y le damos un golpe de horno. Unos 5 minutos a 170º. ¡Tened cuidado que no se doren demasiado!

    Comenzamos a hacer la mezcla para el pastel batiendo en primer lugar el azúcar con la mantequilla a punto pomada. Agregamos la cucharadita de vainilla. A continuación vamos añadiendo las yemas una a una sin dejar de batir y la pizca de sal.

    Posteriormente, vertemos el chocolate fundido al baño maría y añadimos poco a poco la harina y levadura previamente tamizadas.

    Continuamos agregando las nueces molidas. Batimos bien hasta que esté todo bien integrado. Por último añadimos las claras a punto de nieve con movimientos envolventes. Vertemos nuestra mezcla de sacher-nuez en un molde previamente engrasado con mantequilla y harina y horneamos entre 30-40 minutos a 180º. Comprobamos hasta que el palillo salga limpio. No lo dejéis más tiempo para que no pierda jugosidad.

    Dejamos enfriar en una rejilla y luego nos disponemos a cortar, rellenar y a montar las minitartitas. En mi caso he utilizado mermelada de fresa pero podéis utilizar la clásica de albaricoque o la que prefiráis.

    Para la cobertura calentamos la nata al fuego y cuando esté a punto de hervir, vertemos sobre el chocolate troceado en un cuenco. Templamos y... ¡Listo para cubrir nuestros bocaditos! Dejamos que solidifiquen y ya están preparados para deleitar a los paladares más exigentes.