Precalentamos el horno a 180º (calor arriba y abajo). Preparamos la bandeja de 12 cupcakes con cápsulas resistentes a la grasa. Trituramos los pistachos y lo dejamos reposar.
Batimos la mantequilla y el azúcar hasta que la mezcla quede suave y homogénea. Añadimos los huevos, de uno en uno para que se integren perfectamente.
Cuando estos tres ingredientes estén bien integrados, incorporamos la harina y la levadura tamizadas.
Una vez hayamos incorporado la harina y la levadura (¡cuidado no sobrebatir!), añadiremos las semillas de cardamomo, los pistachos y el extracto de vainilla.
Con una cuchara de helado (49mm de diámetro) repartimos la masa en la cápsulas sin exceder 2/3. Horneamos 20 minutos o hasta que al pichar con un palillo, éste salga limpio.
Tamizamos el icing sugar (azúcar glas)con el tamiz más fino que tengamos. Después batimos ésta con la mantequilla a máxima velocidad hasta que se integre. Añadimos el queso crema (recién sacado de la nevera) y volvemos a batir, de menor a mayor velocidad, hasta que la mezcla sea cremosa y homogénea. Batir el tiempo necesario para que la crema sea consistente.
Exprimimos media lima y añadimos aproximadamente una cucharada de su zumo a nuestra buttercream y batimos hasta que se incorpore.
Preparamos una manga pastelera con la boquilla que más nos guste, donde introducimos la buttercream, y decoramos los cupcakes.