Vamos a empezar haciendo el buttermilk y para ello añadiremos 1 cucharada de limón o vinagre blanco a 250 ml de leche (preferiblemente desnatada o semidesnatada) . Dejamos reposar la leche 10 minutos a temperatura ambiente. El producto resultante, tendrá apariencia de leche ligeramente cortada o yogur muy líquido, la removemos y utilizamos en la receta normalmente.
Precalentar el horno a 175º C. Engrasar un molde Bundt de 18 cm. Echar en un recipiente todos los ingredientes líquidos. El aceite, el buttermilk, el colorante rojo, el vinagre, los huevos y el extracto de vainilla, y batirlos , juntos, a velocidad media, durante aproximadamente un minuto o hasta que veamos que todos los ingredientes están perfectamente integrados. Tamizamos ahora todos los ingredientes secos en un mismo bol. La harina, el bicarbonato sódico, la sal, el azúcar y el cacao en polvo.