En primer lugar, mezclamos el queso crema con el chutney, el cebollino, las pipas y una pizca de chat masala en un bol. Una vez mezclado, lo dejamos reposar durante 2 horas y lo pasamos a una manga pastelera. Reservamos.

A continuación, pelamos y cortamos el pepino en tiras de 10 cm aproximadamente con ayuda de una mandolina. Reservamos.

Seguidamente, montamos el ravioli con las tiras de pepino de la siguiente manera: Extendemos una tira de pepino sobre nuestra superficie de trabajo. Con ayuda de la manga pastelera, añadimos el relleno de queso crema en la parte central y cerramos el ravioli con los extremos de la tira de pepino. Repetimos estos pasos con el resto de tiras.

Cuando tengamos todos los raviolis montados, los pasamos a un plato llano y los dejamos reposar durante 20 minutos.

Pasado ese tiempo, mezclamos en un bol el yogur con la miel y salseamos los raviolis.

Picamos un poco de cebollino fresco y decoramos la superficie de nuestros raviolis.

Servimos.