Primero, cogemos 4 alcachofas, las pelamos y ponemos a cocer en agua con harina, zumo de un limón y sal. Una vez cocidas, las reservamos.

Confitamos las setas elegidas en aceite a fuego muy lento y las reservamos para más tarde utilizarlas. Troceamos el pollo en cuartos y éstos, a su vez, en trozos.

Los ponemos en una parisina con aceite de oliva y lo vamos dorando. Una vez que el pollo haya cogido color, añadimos la cebolla cortada en dados de 1 cm y lo vamos rehogando también. Cuando ya esté dorada la cebolla, añadimos dos cuchadas soperas de harina y la tostamos. Una vez tostada, cubrimos con agua y dejamos cocer a fuego lento. Añadimos un majado de ajo y perejil y ponemos a punto de sal y de pimienta negra molida.

Por otro lado, cocemos los 4 huevos y cogeremos las yemas. Hacemos un majado de yema con almendra que añadiremos a la cocción del pollo. Esto hará que la salsa quede más ligada. Cuando el pollo ya está cocido, añadimos las alcachofas y las setas, al igual que el pimiento en tiras finas cortadas.