Panecillos de pimientos rojos asados Por:
Claves
Ingr. prin.:Masas y Hojaldres
Plato:Pan
Estilo: Cocina casera,
Ambiente: Friends,
Tiempo: alto
Dificultad: medio
Ingredientes principales
70 gramos de agua
20 gramos de levadura fresca
500 gramos de harina de fuerza
100 gramos de pimientos rojos asados
50 gramos de cebolla
150 gramos de leche
50 gramos del jugo de los pimientos
35 gramos de aceite de oliva
5 gramos de azúcar
10 gramos de sal
  1. Receta paso a paso
  2. En primer lugar, vamos a elaborar la masa madre, que aportará aroma y sabor a los panecillos. Para ello, pon en un cuenco el agua a temperatura ambiente. Si está fría, la puedes introducir unos segundos en el microondas (cuidado, porque no queremos agua caliente, solo tibia). Frotando con las yemas de los dedos, deshaz la levadura fresca en el agua. Por último, añade 120 gramos de harina y mezcla hasta obtener una bolita de masa.

    Coloca la masa en el cuenco y cubre con un paño de cocina limpio y húmedo. Pon el cuenco en un lugar templado y alejado de corrientes durante unos 20 minutos para el primer levado (hasta que la bola de masa doble su tamaño).

    Mientras, pica en trocitos los pimientos rojos asados y reserva. Trocea en cuadritos pequeños la cebolla, pon en un bol con una cucharada de aceite (unos 15 ml) y cocina unos 5 minutos en el microondas hasta que esté transparente y blanda. Conviene sacar el cuenco un par de veces y remover para que no se queme. Reserva.

    Coge un cuenco grande y echa la leche, el jugo de los pimientos (si no tienes suficiente, completa con leche hasta que tengas, en total, 200 ml), 20 gramos de aceite (cucharada y media), la sal y el azúcar. Incorpora el resto de la harina de fuerza (380 gramos) y mezcla un poco. Añade la masa madre, los pimientos y la cebolla y amasa con las manos hasta obtener una mezcla uniforme.

    Reserva la masa en el cuenco, tapada de nuevo con un paño limpio y húmedo, en un lugar templado. Debe levar de nuevo. Necesitará unos 30-45 minutos (depende de la temperatura). Vigila, porque tampoco conviene que aumente demasiado su tamaño. Mientras, prepara el recipiente donde vayas a hornear la masa. Yo usé un molde de magdalenas. Para que no se pegara, corté cuadrados de papel de horno y, con el culo de un vaso, los di la forma de los huecos. En la siguiente imagen puedes ver que es muy fácil.

    Coge porciones de masa (las mías, de unos 50 gramos) y coloca en los moldes. Bate un huevo y, con una brocha de cocina, pinta los panecillos con el huevo. Deja que reposen un ratito (unos 15 minutos en una zona templada) para que crezcan (lo justo para que rellenen el hueco del molde y queden redonditos por arriba). Este será el tercer levado.

    Precalienta el horno a 200º con calor arriba y abajo con ventilador. Llena una bandeja de horno con agua e introdúcela en la parte inferior (para que haya humedad). Cuando el horno esté bien caliente, abre la puerta y RETÍRATE (saldrá vapor de agua y QUEMA). A continuación, pon otra bandeja (o la rejilla) en la zona central del horno y, sobre ella, el molde con los panecillos. Hornea durante 10 minutos. Cuando estén doraditos, saca la bandeja (puedes probar si están pinchándolos con una brocheta y comprobando que salen miguitas), de nuevo con MUCHO CUIDADO al abrir la puerta del horno porque saldrá vapor. Espera unos 5 minutos y traslada a una rejilla para que se terminen de enfriar.