Helado cremoso de frambuesas frescas

En primer lugar para hacer la base de crema inglesa para el helado tenemos que verter en un cazo la leche, la nata y la mitad del azúcar, junto con la vaina de vainilla y cuando rompa a hervir lo retiramos del fuego y lo dejamos infusionar unos minutos.

En un bol, poner las yemas y el resto del azúcar y lo batimos con las varillas hasta que esté espumoso y le incorporamos la leche sin dejar de batir y lo volvemos a poner en un cazo previamente pasando por un colador.

Cocer la crema al baño María o fuego directo sin que sobrepase los 85° C o se cortara, tenemos que remover constantemente por toda la superficie y paredes del cazo con una espátula o paleta de cocina y lo cocinamos hasta que al meter una cuchara y pasar el dedo se quede la marca de la pasada en la cuchara.

Enfriar rápidamente en un baño María con hielo para bajar rápidamente la temperatura y guardar en el frigorífico hasta que este completamente frío.

Trituramos con ayuda de una turmix o baso batidor todas las frambuesas hasta que quede un triturado uniforme y lo guardamos en el frigorífico.

Montamos con una varilla la nata con los 50 gramos de azúcar hasta que forme picos y la reservamos en el frigorífico.

Montamos a punto de nieve las claras de huevo con una pizca de sal.

En un bol amplio vertemos la crema inglesa, que es la base de nuestro helado a la que le añadimos el puré de frambuesas que reservamos antes y los 2 chupitos de licor de frambuesa y mezclamos bien hasta obtener una mezcla homogénea.

Añadir a la mezcla anterior las claras de huevo y lo mezclamos con movimientos suaves y envolventes para que se integre, esto mismo lo repetimos con la nata y lo volvemos a mezclar suavemente todo junto.

En un molde, recipiente o terrina a poder ser de acero inoxidable vertemos la preparación de helado de frambuesas lo tapamos con papel film y lo metemos en el congelador.

Debemos de remover completamente el helado cada media hora hasta que este completamente helado para que no cristalice en exceso y estará listo.

Antes de servir, lo debemos sacar del congelador por lo menos 10 minutos antes.