Las collejas son unas "verduras" silvestres que se cojen en los ribazos en el campo saliendo el invierno. Si sabes dónde buscarlas, las puedes encontrar a montones, pero hay que reconocerlas. Os pongo una foto, para que las veáis y os prometo que si este año salgo a buscar, añadiré una foto de cómo se encuentran en el campo. Suelen estar amontonadas, o como se dice por aquí, en un "rodal"; todas juntitas y bien juntitas. Y se cogen antes de que se "espiguen" y den como una flor, que en realidad contiene las simientes. Os confieso que mi hermano, que es un arrocero de cuidado, le gustan mucho y ha conseguido tener en su huerto su propio "rodal" de collejas. Pero mi vecina, que las coje en su pueblo, las congela y de vez en cuando me da un buen montón de ellas, y se cocinan igual. Aunque claro, lo fresco ya sabéis que es lo fresco. A mi abuela le encantaba hacerlas en tortilla. Les daba una vueltecita en la sartén y luego se hacía una tortilla con ellas. Y también estaban superbuenas. Pero como no son fáciles de conseguir, a mí me parece un pecao gastarlas así. En arroz dan un resultado exquisito. Lo de los caracoles ya es opcional. Si te gustan y les pones le dan un sabor increible, pero si no te gustan y no quieres, con unos taquitos de jamón o símplemente con las collejas, ya sale un plato superbueno. Ya lo veréis. ELABORACIÓN: Es facilísimo prepararlo; casi tenemos que celebrar una fiesta cuando lo hacemos, pero en realidad yo creo que lo que celebramos son las collejas, porque este plato no tiene ningún misterio, vais a ver. Ponemos aceite a calentar en nuestra olla de Bra, y sofreimos el pimiento, los ajos, las collejas y cuando ya estén tiernas, el tomate. Una vez preparado este sofrito, añadimos el pimentón. Luego los caracoles, el caldo y el azafrán. Lo dejaremos hervir casi una hora y reposar. Mucho mejor de un día para otro. En el momento de comer, lo pondremos a hervir de nuevo, y añadimos el arroz. Sólo lo tendremos 15 minutos al fuego, para que no se pase y tendremos la precaución de haberle puesto suficiente caldo para que quede meloso (casi 3 partes de caldo por una de arroz). A los 15 minutos lo apartamos y le dejamos otros 5 minutos de reposo antes de servir. Ya me contaréis cómo sale de bueno y el sabor tan especial que le da esta verdura. Increible!!